Aprende cómo mancillar la pureza virginal de tu Mac instalando Windows 10 sin sufrir demasiados dolores de cabeza y por poco dinero.

Tras sucesivos cabreos con los servicios informáticos de la Administración Pública (española, sí), especialmente con su compatibilidad con Mac OS X, accedí a investigar si era posible instalar Windows 10 en mi Mac con Boot Camp y una licencia legal, lo más barata posible.

Lo de lo más barata posible es importante, puesto que solamente necesito Windows para poder firmar con mi DNI electrónico. Cada vez que tengo que hacer un trámite con la Administración en Mac me entran sudores fríos y termino haciendo el pino-puente con las orejas entre Firefox, Chrome, el portátil de mi señora...

Licencia de Windows 10 Pro, buena, bonita y barata

Buscando por Internet, en eBay y sitios así, puedes encontrar licencias baratas de dudosa procedencia por 10€ o menos, pero corres el riesgo de que dejen de funcionar en cualquier momento.

Afortunadamente encontré una página, La Tienda de las Licencias, de unos tipos de León, que venden licencias de segunda mano (por ejemplo, de portátiles que se estropean y cuya licencia no se vuelve a usar para nada). Al parecer el reciclaje de licencias, aunque ilegal en los Estados Unidos, es legal en Europa. Eso lo explican bien en la letra pequeña al final de la página principal (de hecho el enlace anterior lo he sacado de ahí).

El diseño de la página es un poco cutre, la verdad. Las páginas de diseño cutre me hacen sospechar y si además no tienen certificado de seguridad SSL, no las toco ni con un palo, pues podrían ser un timo o, al menos, hacer más arriesgado introducir los datos de tu tarjeta de crédito en algún formulario. En este caso sí había certificado de seguridad, así que seguí investigando.

La información de la página era muy detallada y los sellos de Confianza Online y similares, el hecho de poder pagar con PayPal, la gran cantidad de comentarios positivos que parecen hechos por personas de carne y hueso, los comentarios en prensa, la garantía (que a priori no sabes si van a cumplir) de que te devuelven el dinero si la cosa no funciona, y lo asequible del precio (menos de 25€ en total pagando con PayPal) me ayudaron a decidirme por esta licencia.

Tras finalizar el proceso de compra me llegaron los emails automáticos pertinentes de confirmación tanto de PayPal como de la propia tienda. El email con mi licencia me llegaría horas más tarde, puesto que al parecer se envía manualmente tras conseguir la clave de licencia.

Instalando Windows 10 en el Mac

Una vez que tenía mi código de licencia, lo siguiente que necesitaba era una imagen de disco ISO del sistema operativo, que se puede descargar directamente desde la página web de Microsoft, para mayor tranquilidad.

Para descargar la imagen ISO necesitarás elegir el idioma y si quieres una imagen del sistema operativo de 32 ó 64 bits. Yo escogí la segunda opción.

En mi caso acababa de actualizar mi Macbook Pro a Mac OS X Mojave tras realizar una copia de seguridad del sistema en Time Machine. Es muy importante que tú hagas lo propio, al menos la copia de seguridad, por si acaso.

Lo siguiente es ejecutar el Asistente de Boot Camp, que te permitirá crear una partición para alojar el sistema operativo. Como mínimo necesitarás 40GB de disco. Yo seleccioné 64GB para ir sobrado y porque, como buen informático, me gustan las potencias de 2. Además, tendrás que seleccionar la imagen ISO con la que vas a instalar Windows. Curiosamente el asistente la auto-detectó dentro de la carpeta Descargas de mi usuario.

Recuerda tener a mano la clave de licencia apuntada en algún lado, la necesitarás en cuanto comience la instalación.

Cuando inicies el proceso, el asistente se encargará de todo, incluyendo la descarga de controladores ad-hoc para que Windows sepa funcionar con tu Mac. Cuando el asistente termine de hacer sus cosas en OS X, tu Mac se reiniciará y comenzará la instalación de Windows 10, en definitiva, entrarás en un mundo de oscuridad, ventanas parpadeantes, asistentes pesados (Cortana), barras de progreso que parece que progresan pero no se menean...

Procura responder a las preguntas lo mejor que sepas (incluyendo las 200 preguntas pidiendo permiso para atentar contra tu privacidad) y cruza los dedos.

Para tu tranquilidad voy a comentarte los principales problemas a los que me he tenido que enfrentar durante la puesta en marcha y cómo los he solucionado.

Solución de Problemas

En todo artículo sobre cualquier cosa relacionada con Windows hay que incluir un apartado de solución de problemas, si no no estaría completo. Windows sin problemas es como un jardín sin flores.

No hay forma de conectar a una red WiFi durante la configuración inicial

¡Pues claro, melón! ¿No ves que Windows no tiene los controladores necesarios para utilizar el chip de comunicaciones de tu Mac? Anda, pulsa en Omitir este paso y continúa con la maravillosa experiencia de instalar Windows. Los controladores se instalarán con un asistente que hay al final de la instalación, y que Apple ha puesto ahí precisamente para eso.

Tras la instalación no puedo conectarme a mi flamante red WiFi de 5GHz

Esto es una cagadilla de Apple con el controlador del chip de comunicaciones. Conecta tu Mac por cable Ethernet o hazlo por WiFi, pero a una de la banda de 2,4GHz.

Después, utiliza el programa de Actualización de Software de Apple (busca Apple en el buscador de Cortana). Deberías tener actualizaciones de drivers, entre ellos de la WiFi y de Bluetooth.

Tras eso ya podrás conectarte a tu red de 5GHz. En mi caso esto ocurrió con un Macbook Pro de 15" con Touch Bar de 2016.

Mi Mac arranca siempre en Windows, y no en OS X

Para solucionar esto, tienes que arrancar en OS X primero. Nada más encender el equipo pulsa la tecla ALT. Debería aparecerte la opción de elegir el disco/partición de arranque. Selecciona la de OS X y pulsa ENTER.

Una vez hayas iniciado sesión en OS X, ve a Preferencias > Discos de arranque y selecciona la partición de OS X. Es posible que tengas que desbloquear la edición con el candadito habitual en las pantallas de preferencias del sistema.

Eso es todo, amigos…

La verdad es que no ha sido muy complejo, pero he de reconocer que ha habido momentos de tensión durante la instalación cuando se han presentado los primeros problemas, sobre todo los de la WiFi. Probablemente un usuario medio hubiese sudado bastante más que yo para solucionarlos o, incluso, hubiesen tirado la toalla.

Eso son cosas a mejorar por parte de Apple pero también es cierto que, ¿a qué loco se le ocurre meter Windows en un Mac?

Con esto y un bizcocho… 😎